Compartimos un rato de conversación con Roberto San Juan, Presidente de Lares La Rioja, la asociación de centros residenciales del sector solidario que gestiona 12 fundaciones sin ánimo de lucro centradas desde hace más de 100 años en cuidar a las personas.
¿Qué es Lares La Rioja y cuál es su área de actividad?
En Lares La Rioja atendemos aproximadamente a 900 personas. 900 residentes están en nuestras casas, de los cuales 20 están en Centro de Día, ya que también tenemos residencia con Centro de Día. Lares La Rioja se compone de 12 residencias de las cuales 4 de ellas están en la capital, en Logroño, y 8 centros están ubicados a lo largo de toda la geografía riojana. Nosotros nos ocupamos de atender a las personas en su territorio, lo más cerca posible, por eso estamos en poblaciones que llegan justo a los 500-1000 habitantes, en poblaciones como Ezcaray, Santo Domingo, Haro, Nalda, Cervera del río Alhama, Alfaro, Anguiano y San Vicente de la Sonsierra.
Intentamos que toda la población esté cercana a nosotros y nosotros acercamos las residencias a sus lugares de origen. Es uno de los principios básicos de Lares La Rioja a nivel de nuestra pequeña comunidad. Es importante atender a las personas en el territorio y lo más cerca posible. Por eso tenemos casi 500 plazas repartidas fuera de Logroño, en las poblaciones más pequeñas.
¿Qué identifica y conecta a todos los centros de Lares La Rioja?
Nosotros ponemos en el centro a la persona, nuestro objetivo es atender a la persona allí donde está. Y a partir de ahí creamos nuestra red solidaria de atención, creando vínculos con la familia, con los trabajadores… Buscamos que los medios se adapten a la atención, que va modificándose con el tiempo. Cada vez las personas que llegan nuestros centros tienen un nivel de dependencia mayor. Por eso hay que estar a la última en tecnología y en innovación, apoyando y apostando por la atención integral centrada en la persona, que es como se llama en este siglo a lo que se han hecho nuestras casas con tradición, en muchas de ellas con más de 100 años de atención a las personas.
También atendemos desde la solidaridad a personas que económicamente no pueden llegar a estas plazas de atención y que no pueden ser atendidas por las plazas públicas. Son lo que nosotros denominamos plazas solidarias.
El trabajo con las familias es otro de nuestros pilares. La persona es un todo y no le se puede separar de la familia. Por eso, la familia forma parte del día a día, es parte también del trabajador, es parte todo lo que significa que no pierda sus raíces. Por eso es tan importante destacar que nuestros centros están a pie de calle, no están fuera de las poblaciones. Nuestros residentes salen a la calle y tienen su jardín por donde han estado paseando durante toda su vida.
Según tu visión como presidente de Lares La Rioja, ¿cuáles serían los valores diferenciales respecto a otras entidades que también hacen cuidados?
Cuando hablamos de poner a la persona en el centro es lo que nos creemos. Para nosotros la persona es el objetivo, no es el medio para conseguir unos beneficios. La persona es la atención. Nosotros creemos en el “buen cuidado”. Lo hemos creído durante más de 100 años que tienen muchas de nuestras casas. Seguimos apostando por la persona, por nuestros compañeros trabajadores… que sea una atención directa. Entendemos la dificultad de su trabajo, proponemos y apostamos con la Administración para conseguir una mejor formación y atención. Creemos que el sector necesita mucho apoyo y que entre todos tenemos que volver a dignificarlo para que las personas mayores sean realmente el centro de las políticas sociales. Es importante que las familias apuesten por este sistema y presionen para que las administraciones, junto con nosotros, los sindicatos y todos los poderes. Así podemos verdaderamente cuidar a las personas mayores como se merecen después de una larga vida, después de habernos enseñado todos los valores… qué menos que nosotros respondamos a lo que nos han dado, con esta calidad de vida en sus últimos años, que esperemos que sea muchísimos.